A. Climent1, M. Aiguabella1, M. Falip1, A. Sabaté2
1 Unidad de Epilepsia. Servicio de Neurología. 2 Servicio de Cardiología. Hospital Universitario de Bellvitge. Barcelona
Objetivos. Los eventos paroxísticos nocturnos y la pérdida de conciencia transitoria tiene un largo diagnóstico diferencial. Suceden en decúbito supino mientras el paciente duerme. En la mayoría de casos el síncope nocturno no está considerado en el diagnóstico diferencial. Presentamos cinco casos diagnosticados inicialmente como epilepsia en los que otros estudios demostraron un origen vagal o cardiogénico.
Métodos. Incluimos pacientes que han presentado exclusivamente eventos paroxísticos nocturnos diagnosticados al inicio como epilepsia. Durante la reevaluación en nuestro centro (hospital de nivel terciario con una unidad monográfica para epilepsia) se descartó este diagnóstico. Se demostró un origen vagal, cardiogénico o hipoperfusión cerebral. Los antiepilépticos se retiraron en estos pacientes. Después de un año de seguimiento la evolución fue excelente.
Resultados. Cinco pacientes (3 hombres y 2 mujeres) fueron incluidos. La media de edad fue 49 años. Cuatro pacientes presentaron pérdida de conciencia que se siguieron en 3 de ellos de movimientos clónicos en las extremidades. El test de vasculación positivo dio el diagnóstico definitivo de síncope vasovagal en 3 pacientes. El otro tuvo un síncope cardiogénico a consecuencia de una disfunción en su marcapasos. El quinto paciente presentaba episodios confusionales nocturnos frecuentes con movimientos anormales en las extremidades superiores. Éstos desaparecieron tras intervenirse de estenosis aórtica grave, siendo diagnosticado finalmente como hipoperfusión cerebral.
Conclusiones. Los eventos paroxísticos nocturnos tienen una etiología variada, entre la que deberíamos incluir los síncopes cardiogénicos, así como los vasovagales o la hipoperfusión cerebral.
ENE